Las imágenes de los sitios web deben ser livianas para que las páginas se abran con mayor rapidez.
Dos cosas sacan usualmente de las casillas a un usuario de Internet y de correo electrónico: esperar demasiado tiempo a que se despliegue una página web y no poder recibir un mensaje de correo con archivos gráficos anexos. En la mayoría de los casos, eso se debe a que las imágenes del sitio web o los archivos adjuntos a un mensaje de correo son demasiado voluminosos.
Para reducir el peso de las imágenes en Internet se emplean varios métodos: se convierten a formatos gráficos como GIF o JPEG (que comprimen las imágenes), se reducen sus dimensiones o se disminuye su resolución. Eso genera archivos más pequeños. Una imagen para Internet debe estar en un archivo pequeño (entre 2 y 20 kilobytes es una buena medida) para que lleve menos tiempo cargarla.
Para convertirlas en estos formatos se puede emplear programas para editar imágenes como Corel PhotoPraint, Paint Shop Pro, Fireworks y Xara.
¿QUE FORMATO DEBEMOS UTILIZAR?
JPEG y GIF son los dos formatos gráficos más usados en Internet. Su ventaja es que comprimen las imágenes y por ello generan archivos de menor tamaño. Pero ambos usan métodos distintos, y por ello el formato ideal depende del tipo de imagen que vaya a publicar en Internet.
Si va a publicar fotos o imágenes con muchos colores, utilice JPEG. Este formato es más útil en esos casos debido a que comprime las imágenes eliminando información que no es visible para el ojo. Soporta un gran número de colores (16 millones de colores).
GIF, en cambio, comprime las imágenes reduciendo el número de colores a un máximo 256. Por ello es útil para gráficos sencillos, logos, botones y otros elementos que tenga pocos colores. Si usa GIF en una imagen rica en color, esta quedará de mala calidad.
Dos cosas sacan usualmente de las casillas a un usuario de Internet y de correo electrónico: esperar demasiado tiempo a que se despliegue una página web y no poder recibir un mensaje de correo con archivos gráficos anexos. En la mayoría de los casos, eso se debe a que las imágenes del sitio web o los archivos adjuntos a un mensaje de correo son demasiado voluminosos.
Para reducir el peso de las imágenes en Internet se emplean varios métodos: se convierten a formatos gráficos como GIF o JPEG (que comprimen las imágenes), se reducen sus dimensiones o se disminuye su resolución. Eso genera archivos más pequeños. Una imagen para Internet debe estar en un archivo pequeño (entre 2 y 20 kilobytes es una buena medida) para que lleve menos tiempo cargarla.
Para convertirlas en estos formatos se puede emplear programas para editar imágenes como Corel PhotoPraint, Paint Shop Pro, Fireworks y Xara.
¿QUE FORMATO DEBEMOS UTILIZAR?
JPEG y GIF son los dos formatos gráficos más usados en Internet. Su ventaja es que comprimen las imágenes y por ello generan archivos de menor tamaño. Pero ambos usan métodos distintos, y por ello el formato ideal depende del tipo de imagen que vaya a publicar en Internet.
Si va a publicar fotos o imágenes con muchos colores, utilice JPEG. Este formato es más útil en esos casos debido a que comprime las imágenes eliminando información que no es visible para el ojo. Soporta un gran número de colores (16 millones de colores).
GIF, en cambio, comprime las imágenes reduciendo el número de colores a un máximo 256. Por ello es útil para gráficos sencillos, logos, botones y otros elementos que tenga pocos colores. Si usa GIF en una imagen rica en color, esta quedará de mala calidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario